Los Dones Espirituales temporales

En la iglesia Plenitud de vida en Cristo creemos y ejercitamos los dones del Espíritu Santo, entendiendo lo siguiente: Don espiritual es una capacidad dada por la gracia de Dios a todos los creyentes. El Espíritu Santo con el propósito de edificar a todo creyente del cuerpo de Cristo (1 Co.12:7; Ef 4:7). Enseñamos que las Escrituras manejan dos tipos de dones espirituales: los dones temporales y los dones permanentes.

Los dones permanentes son:

Evangelismo (Ef.4:11) Celibato (1 Co. 7:7)
Pastor (Ef. 4:11) Repartir (Ro.,12:8)
Enseñanza (Ro. 12:7; Ef 4:11; 1 P 4:11ª) Ayudar (1 Co. 12:28)
Servicio (Ro.12:7; 1 P 4:11b) Misericordia (Ro.12:8)
Presidir (Ro. 12:8) Exhortación (Ro. 12:8)
Administrar (1 Co. 12:28) Fe (1 Co.12:9)

Estos dones son visibles, los vemos en acción en los hermanos de las iglesias y hasta disfrutamos su ministración en nuestras vidas para nuestro crecimiento espiritual. Los que tienen estos dones los ministran con efectividad, pues Dios se los dio para ello. Pero hay otro tipo de dones que se usaron en la iglesia primitiva por algún tiempo para cumplir algunos propósitos, que una vez cumplidos, dichos dones cesaron. Pero en la actualidad muchas iglesias de tipo emocional pretenden usarlos, diciendo que todavía están vigentes. A continuación los estudiaremos, tratando de explicar bíblicamente porque ya cesaron.

Los dones temporales son:

Don de apóstol (Ef.4:11) Don de profecía (Ef. 4:11)
Don de milagros (1 Co 12:28) Don de sabiduría (1 Co. 12:8)
Don de sanidad (1 Co 12:9, 28, 30) Don de ciencia (1 Co. 12:8)
Don de interpretación de lenguas (1 Co 12:10) Don de lenguas (1 Co. 12:18)
Don de discernimiento de espíritus (1 Co 12:10)  

Es importante notar que la persona o personas que tenían estos dones, y los permanentes, los transmitían con efectividad, sin ninguna falla, pues era el don que Dios les dio. (Dt. 18:20-22).. Cuando decimos que estos dones ya pasaron, no estamos diciendo que se le acabó el poder a Dios para hacer cosas maravillosas, lo que estamos diciendo es que ya no hay creyentes con ese don. Por ejemplo si Dios quiere sanar hoy en día a alguien, Él lo puede hacer directamente, si Él así lo quiere, por medio de la oración de los creyentes y sin la intervención de un sanador profesional. (Cf. Stg. 5:14-15)

Algunas de las citas bíblicas que enseñan que los dones son temporales son:

  1. (Hechos 1:21-23) (Cf.1 Co.9:1)

El apóstol Pablo en Efesios 4:11 dice que Cristo dio apóstoles a la iglesia. Estos fueron usados para dejarnos el fundamento apostólico, junto con los profetas, donde Cristo es la piedra principal del ángulo. Ellos nos dejaron la doctrina de Cristo la cual ya quedó de manera permanente en la iglesia para que se enseñe a todos los cristianos y seamos constantes en ella y no la alteremos (1 Co. 3:10; Ef. 2:20)

Este don ya cesó con la muerte de los apóstoles, porque ellos fueron únicos en su género. No cualquiera podía ser apóstol (en el sentido estricto), los que lo fueron cumplieron con requisitos especiales, como el tener que estar con Jesús y el resto del grupo desde el bautismo de Jesús hasta su ascensión después que resucitó (Hch. 1:21-23). Pablo fue apóstol comisionado directamente por Cristo al cual, el vio resucitado (1 Co 9:1). Los requisitos para ser apóstol eran: 1) Haber visto a Jesús con los propios ojos después de su resurrección 2) haber sido específicamente comisionado por Cristo como su apóstol. Los predicadores o maestros, que se dicen apóstoles hoy en día no cumplen con ninguno de los requisitos.

  1. (Hechos 10:44-48; 11:17-18)

Aquí vemos la conversión de un grupo de gentiles. Las manifestaciones del Espíritu Santo que les vinieron cuando creyeron, (como las lenguas), tuvieron el propósito específico de servir de señal a los judíos cristianos para que se dieran cuenta que Dios también salva a los gentiles. Ahora ya no hay que llevar a los gentiles con los judíos hablando en lenguas para que se convenzan de su aceptación por Dios, esto ya es un hecho consumado. Las lenguas que Dios el Espíritu Santo en Hch. 2:4 fueron una señal de juicio para Israel por su incredulidad (1 Co. 14:21-22).

  1. (1 Corintios 13:8-10)

Estos textos difíciles de interpretar con precisión, por lo menos nos señalan tres dones espectaculares, así como pasajeros o temporales. La palabra “lo perfecto” del griego teleios, tiene como significados completo, íntegro, perfecto, maduro, bien desarrollado, adulto, y por eso, los estudiosos no se han podido poner de acuerdo el momento exacto que cesarían. Unos dicen que cesaron cuando se cerró el canon de la Escritura (393 d.C.), otros dicen que cesarán hasta la Segunda Venida de Cristo o hasta que lleguemos al estado eterno.

Puede haber una distinción en la manera como la profecía y el conocimiento acabarán  y el cese del don de lenguas.  Las formas verbales empleadas hacen esta distinción. Lo que acabará con el conocimiento y la profecía es lo “perfecto”. La profecía es la predicación de la Palabra y ésta como vemos continúa, el conocimiento (ciencia) es obvio que continúa también. Lo perfecto debe corresponder al estado eterno, porque allá en la gloria veremos a Dios cara a cara.

Sin embargo, Pablo emplea otro verbo para las lenguas “cesarán” del griego katargeo, que significa: anular, hacer ineficaz, cancelar, destruir, quedar libre de, poner fin. Esto indica que cesará por sí mismo como lo hizo al final de la era apostólica. No terminará con la llegada de lo perfecto porque ya habrá cesado entonces. Las lenguas cesaron porque ya no había necesidad de verificar los mensajes verdaderos de Dios al completarse las Escrituras.

  1. (1 Corintios 14:20-22)

Parece que el don de lenguas en ese tiempo tuvo como propósito ser una señal de juicio a los judíos incrédulos que rechazaron a Cristo. Parece que les anunciaban el juicio de Roma del año 70, cuando el general romano Tito Vespaciano destruyó Jerusalén. Dios ya había usado esta señal de las lenguas para enjuiciar a Israel y a Judá por medio de los asirios y de los babilonios (Dt.28:49; 2 R.17:23; Is.28:11-12; Jer.15:5). Y parece que en este tiempo se repite la misma señal.

  1. (Hebreos 2:3-4) (Cf. Hch 4:23-31; 13:9-12)

Aquí el escritor deja en claro que las señales milagrosas (don de sanidad, resucitar a los muertos, multiplicar alimentos, etc.), pertenecieron a los que aprendieron de Jesús la salvación que Él enseñó, es decir., sus discípulos. Mientras ellos predicaban este evangelio, el Padre lo autenticaba con señales, prodigios y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad. Parece entonces que estas señales incluyendo los dones espectaculares cesaron cuando cesó la actividad apostólica.

CONCLUSIÓN:

Tenemos evidencia bíblica e histórica de que estos dones desaparecieron. Por ejemplo, mas tarde vemos que el apóstol Pablo no usó el don de sanidad, como fue el caso de Timoteo.  Salvo en las cartas de Corinto  no se habla del don de lenguas. La iglesia de fines del siglo primero, hasta fines y principios del siglo XVIII no usa los dones temporales. Es mejor usar los dones seguros, que no se cuestiona su permanencia. También tengámosle toda la autoridad a la Palabra, lo cual suple a los dones de profecía.